Seguimos completando el diario realizado durante nuestro periplo por China el pasado verano, que con la agenda que tenemos lo teníamos un poco abandonado.
Hoy nos toca contaros el último día de nuestra estancia en Taiyuan. Región que nos cautivó tanto por su territorio como por sus gentes. Una gran experiencia. Pero no podíamos marcharnos sin entrenar en el Qing Tian Palace, para después coger el tren bala en dirección a Songshan donde tuvimos el gran privilegio de entrenar en el templo taoísta más grande de toda China.
Pero eso lo dejamos para el siguiente capítulo.
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